martes, 3 de febrero de 2015febrero 03, 2015
Un mensaje poético cuyo contenido puede tornarse pesimista, pero al final nos deja una maravillosa lección: El verdadero camino no implica una ruta trazada o creada por los hombres en manera alguna; el camino por el cual debemos de andar para alcanzar la meta, que es llegar a Dios el Padre, es una persona: JESUCRISTO.
Es difícil Señor Señor, no es fácil vivir en un mundo intranquilo y confuso; es difícil creer, cuando existe tanta incertidumbre; es penoso esperar, cuando hay tanta confusión. Es difícil amar, cuando hay tanta decepción; es complicado ser honesto, cuando hay tanta maldad; es difícil cumplir el deber, en medio de tanta competencia. Es peligroso manifestarse, cuando hay tanta incomprensión; es difícil ser tranquilo, cuando hay tanta violencia; es difícil ser luz, en medio de tanta oscuridad. Es difícil ser humilde, en un mundo que aprecia la gloria y el prestigio; es difícil ser camino, cuando hay senderos tan diversos; es difícil consolar, cuando hay tanto desespero. Es difícil ser calmado, en un mundo agitado; es difícil ser fuerte, cuando son tantos los débiles. Mientras tanto, Señor, sé que necesito creer, amar, esperar, ser bueno, ser luz, ser camino. Y sé también que todo eso sólo es posible con Tu fuerza, porque Tú eres nuestro Camino, Verdad y Vida.